GENERALIDADES ACERCA DE LA LITURGIA.
El estudio de la sagrada liturgia, debe ser de gran importancia para la formación de los sacerdotes, quienes se encargan de administrar los bienes de Dios en su pueblo, por medio de acciones y momentos, que deben estar observados dentro de unos aspectos netamente litúrgicos, para entenderse como verdadera comunicación del hombre con su Dios.
Para encontrar el verdadero sentido de la liturgia, en la historia de la Iglesia, es preciso entrar a definir dicha palabra, significado que nos muestra claramente el cardenal Sodano: “Se llama liturgia al culto público de la Iglesia, efectuado como Iglesia, en nombre de la Iglesia y en comunión con la Iglesia. Este incluye ritos y ceremonias con que expresamos el culto a Dios. La liturgia principal es la Santa Misa”. “A través de los signos sacramentales bebemos de las fuentes de la salvación para ser plasmados y transformados hasta conformar nuestra vida con la de Cristo”. Esto es precisamente lo que consideramos como liturgia, y es a través de la historia que se ha llegado a la actualización de este concepto.
Durante muchas épocas, el concepto de liturgia a avanzado y cambiando desde la misma historia de la salvación, en donde se identifica la liturgia con el culto, a demás de que es a través del culto en donde se da adoración a Dios, es ese culto, el que permite un desarrollo litúrgico posterior, con la aparición del templo, lugar de oración, en el cual se debían llevar alguno ritos, que debían partir de un sentido litúrgico, mas allá de esas primeras manifestaciones de culto, podemos observar a través de los tiempos y épocas especificas, como ha evolucionado dicho concepto de liturgia, pasando de una concepción de que la liturgia y el culto era propio de unos sacerdotes, a pasar al concepto renacentista de que la liturgia y el culto, es la manifestación de fe de un pueblo para con su Dios. Además dentro de esta historia del concepto se dieron muchas reformas dentro del culto mismo, en donde la liturgia llega a comprenderse como la manifestación de fe a través de actos litúrgicos específicos, organizados, que nos permiten tener una mejor comunicación con Dios desde la misma comunión con mi iglesia, mi liturgia y mis hermanos.
Definitivamente en los últimos siglos, se ha llegado a una concepción clara acerca del concepto de liturgia, que se nos manifiesta como celebración que se centra tanto en el acontecimiento salvífico, como en la dimensión formal de la ritualidad cristiana, sin olvidar su finalidad a favor de los hombres, reconociendo así a la liturgia como misterio, como acción y como vida de plenitud de los fieles a través del culto con su Dios.
Esta finalidad del concepto, nos muestra cual es el sentido del culto cristiano, que es la manifestación clara y concreta de fe y entrega, sin dejar a un lado la importancia y el contenido litúrgico que estas expresiones litúrgicas contiene, que no son simples cultos de adoración, sino que en si tienen un profundo sentido teológico, que nos permite descubrir la importancia de la liturgia en la obra salvífica del hombre.
La sacramentalidad de la liturgia en la Iglesia, se comprende también desde el punto de vista que Jesús es Sacramento del Padre, Cristo es el primer sacramento y raíz de todos los sacramentos cristianos. Cristo es sacramento, por el hecho de ser Hijo de Dios encarnado, por sus obras en su acción mesiánica y salvadora, y por los actos que realiza Cristo y manifiesta el poder de Dios y la Presencia del Espíritu Santo. La vivencia de los sacramentos en las acciones litúrgicas nos lleva a un fin, y es a alcanzar una verdadera configuración con Cristo, quien en definitiva se debe convertir en la finalidad y plenitud de nuestra vida cristiana.
Es a través de este estudio del sentido Cristino del culto, que entramos a mirar un principio teológico fundamental, en esta teoría acerca de la liturgia, se nos indica que la misma liturgia es una autentica obra del Padre, el hijo y el espíritu santo, reconociendo así que la liturgia es siempre don divino de la Iglesia, y obra de esta inefable trinidad en la existencia misma de los hombres, frente al culto religioso, expresión del deseo del hombre de acercarse a Dios, la liturgia cristiana ase parte de la automanifestación del Padre y de su amor infinito hacia los hombres, por Jesucristo en el espíritu santo. La dimensión trinitaria de la liturgia constituye el principio teológico fundamental de su naturaleza, y la primera ley de toda celebración.
Es gracias a esta manifestación del padre en el hijo por el Espíritu Santo, que la liturgia se convierte en economía de la salvación, ya que ella misma con todo lo que la precede, la conversión y la fe, y con todo lo que la sigue que tiene un sentido de vida moral, es el modo presente y actual en la corriente histórica de la salvación como realización del designio del padre a favor de los hombres , la economía de la salvación que en un determinado momento se nos es revelada en la sagrada escritura como economía del misterio, tiene su continuidad en la economía sacramenta. Esto hace que se nos distingan momentos o tiempos sucesivos en la relación histórica del designio salvífico del padre, que se nos manifiesta diariamente y para el cual lo importante y verdaderamente esencial, es que el hombre aprenda a vivir y tener un verdadero sentido de la fe y de su culto litúrgico en la propia vida y existencia, que le permitirá ir alcanzando su propia salvación, como un designio de Dios para los hombres.
Posteriormente, para hacer viva esta manifestación del fe, el culto, desde la acción litúrgica, la misma liturgia contiene un sentido de sacramentalidad, que la podemos ver manifestada en las acciones y celebraciones eucarísticas, las cuales con sus cultos, momentos de piedad, acciones litúrgicas, etc. nos ayudan a tener una mejor vivencia del misterio pascual de Cristo, que se convierte en medio y cumbre de nuestra fe cristiana.
En todas las religiones encontramos ceremonias y solemnidades, que presentan entre sí grandes coincidencias y ponen de manifiesto el anhelo innato del hombre de entrar en afinidad con Dios. Nosotros los cristianos tenemos una iniciativa libre, y gratuita a Dios que él mismo nos manifiesta a través de símbolos litúrgicos propios, que nos sirven para tener una mejor vivencia de su misterio en nuestras vidas.
Finalmente a la luz del concilio Vaticano II tomamos el concepto de liturgia, para tener un verdadero conocimiento de este término a la luz de la doctrina de la Iglesia: “la liturgia es obra de Cristo principalmente y de la Iglesia, y la liturgia tiene como finalidad la santificación de los hombres y el culto al Padre, de modos que el sacerdocio de Cristo se realiza en dos aspectos, ésta liturgia pertenece al pueblo de DIOS, que en virtud de su bautismo es sacerdocio real con el derecho y el deber de participar de las acciones litúrgicas. La liturgia es fuente y culmen de la vida de la Iglesia. (SC 10).
La noción de la liturgia que nos brinda el Vaticano II, destaca los siguientes aspectos:
a) la liturgia es obra de Cristo total, de Cristo primariamente, y de la Iglesia por asociación.
b) la liturgia tiene como finalidad la santificación de los hombres y el culto al padre.
c) la liturgia pertenece a todo el pueblo de Dios, que en virtud del bautismo es sacerdocio real con el derecho y el deber de participar en las acciones litúrgicas.
d) la liturgia, en cuanto constituida por “gestos y palabras” que significan y realizan eficazmente la salvación, es ella misma un acontecimiento en el que se manifiesta la Iglesia, sacramento del verbo encarnado.
e) la liturgia configura y determina el tiempo de la Iglesia desde el punto de vista escatológico; f) por todo lo anterior, la liturgia es “fuente y cumbre de la vida de la Iglesia”.
En síntesis, la liturgia se puede definir como la función santificadora y cultual de la Iglesia, esposa y cuerpo sacerdotal del Verbo encarnado, para continuar en el tiempo la obra de Cristo por medio de los signos que lo hacen presente hasta su venida.
Sergio:
ResponderEliminarEsta bien tu ejercicio; dejas claro el concepto de liturgia; pero recuerdaque el ensayo responde más a una reflexión personal que a un resumen.
Es puntual el desarrollo del concepto de liturgia, las diferenctes concepciones del mismo y las caracteristicas finales que recoge el Concilio Vaticano II; pero tu reflexión personal esta ausente.